Es tal la falta de credibilidad de los políticos, los incumplimientos y los retrasos de compromisos electorales o programáticos, que la desafección va subiendo como la espuma por días.
Quizá, lo que voy a contar da la razón a los que creen que la política está llena de mierda. Pero siendo repugnante el comportamiento de muchos de nuestros representantes políticos, no está en absoluto generalizado porque, créanlo, hay políticos que cada día batallan por intentar cambiar las cosas, aunque también he de decir que, desafortunadamente, cada vez son menos.
Me indigna, por cierto, que el PSOE en el Cabildo, tan crítico en su tiempo con la gestión de Sodepal, que cuestionaba la poca transparencia que desprendía esta empresa pública y dudaba, también, del beneficio que se extrapolaba, de determinados proyectos, a la sociedad palmera, esa formación política que estando en la oposición, día sí y día también, cuestionándola, ahora intenta hacernos creer que, de la noche al día, todo es perfecto. Calman los posibles problemas de conciencia, lavándose las manos como Pilatos, eludiendo todo tipo de debate sobre Sodepal, en la actualidad.
Ya se sabe que, con la “barriga llena”, en el gobierno, se ven las cosas de distinta manera y, desde luego, como si no pasara nada dirán, para sus adentros, todo sea por seguir en la poltrona. Si no hay que enfadar a “Guada”, no la enfadamos, si hay que comulgar con ruedas de molino, se comulga, todo sea por la “teta”.
Cuán sabio es el refranero español y que tan poco valor le dan a la palabra algunos en estos tiempos. Por ejemplo, desde nuestro colectivo juvenil, Alternativa XXI, siempre hemos mantenido la misma postura en lo que respecta a la instalación de las plantas de asfalto. Por motivos evidentes, consideramos que no se puede menoscabar la salud ni nuestro entorno, el medio ambiente, por el desarrollo de una actividad industrial de esta índole y entendemos que, las dos plantas de asfalto, se emplazarán en medio de núcleos de población agrupada.
Si damos marcha atrás, recordaremos como en plena campaña electoral, determinadas fuerzas políticas no dudaron un ápice en acudir a la asamblea que, desde la Plataforma contra la Instalación de las Plantas de Asfalto, se convocó. Entre muchas cuestiones, en dicho encuentro, firmaron documentos en apoyo y comprometiéndose si, en un momento dado gobernaran, a desarrollar las políticas que, desde la Plataforma, se consideraran de vital interés para culminar su "lucha".
Con la reciente “luz verde”, por parte del Consistorio llanense, para la construcción del depósito de emergencia anexo a la depuradora del polígono industrial del Callejón de la Gata, el empresario de una de las plantas de asfalto, hace unos días, no dudaba en hacer público, ante un medio de comunicación que, con seguridad, antes del verano comenzará su actividad pues, se le otorgará la licencia de apertura necesaria.
Todos admiramos a los políticos que son consecuentes, que llevan a la práctica, lo que dicen y creen. Nos entusiasma ver cómo son fieles a sus principios e ideas. Pero ocurre en ocasiones que las personas que dicen creer en algo concreto a la hora de actuar hacen justo todo lo contrario. ¡Todo sea por arañar votos! y, el PSOE, pese a su nefasta gestión de la crisis económica, sin duda, pudo aguantar el tirón un poco en estas elecciones municipales y autonómicas pasadas, hay que decir las cosas claras, abanderándose a dicha causa, con besos y abrazos de Judas. Muchos ciudadanos confiaron, por tanto, en la postura que, desde esta formación política, mantenían en referencia a revocar la licencia concedida para la instalación de las dos plantas de asfalto en el polígono industrial del Callejón de la Gata.
El 12 de abril del año 2.011, diferentes medios de comunicación recogieron en sus páginas, entre muchos aspectos, el compromiso de la diputada regional, Rita Gómez y, portavoz del grupo municipal socialista por aquella época, así como, también, la palabra dada de los aún candidatos socialistas a las Alcaldías de Los Llanos de Aridane, José María de Vargas y, en El Paso, Dolores Padilla, respectivamente. Reivindicaron la paralización del proceso y anunciaron, se comprometieron, de llegar al gobierno, a llevar a cabo diversas iniciativas.
Ahora, con el paso de un tiempo prudencial, analizando declaraciones y actuaciones, puedo afirmar, sin tener temor a equivocarme que, el refranero español es muy sabio, "donde dije digo, digo Diego".
Jafet Barreto
