El Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane renuncia a la opción de acogerse al plan nacional de pagos a proveedores anunciado por el Gobierno estatal. Según afirmó el concejal de Hacienda de la corporación municipal, Mariano Hernández Zapata “el consistorio no cumple con los requisitos avanzados por el ejecutivo central y el informe de tesorería refleja que hemos abonado todas las facturas registradas hasta el 31 de mayo”.
Hernández Zapata destacó que en los dos últimos años las arcas locales “han dado un giro de 180 grados, cumpliendo la práctica totalidad de los requerimientos contemplados en el Plan de Ajuste que diseñamos para acogernos a la primera convocatoria del programa estatal”. Además, agregó que la “rigurosa política que rige el área de Hacienda en estos momentos garantiza la estabilidad presupuestaria, pese al complejo escenario socioeconómico que vivimos”.
Con los datos en la mano, el edil señaló que “tras acogernos al primer plan de pagos a proveedores del Gobierno estatal hemos pasado de tener más de 7 millones de deudas a proveedores, a deber menos de 3 millones de euros que corresponden a los impagos generados en años anteriores con el Consejo Insular de Aguas, organismo con el que la corporación municipal llegó recientemente a un acuerdo de pago a razón de 150.000 euros al año”.
El responsable de Hacienda atribuyó el cambio de situación económica y la operación de saneamiento que se ha generado en las arcas municipales por una parte “a la grandes dosis de planificación económica y contable que hemos tenido que realizar, así como a la dedicación demostrada por los trabajadores del área de intervención, hacienda y tesorería que le han puesto tantas ganas como horas de trabajo para buscar soluciones y alcanzar los objetivos previstos”.
Además, destacó el compromiso de los concejales del grupo de Gobierno “que desde el primer minuto tomaron conciencia de la importancia de afrontar una situación económica insostenible, como la que nos encontramos a nuestra llegada, y que exigía recortar gastos y tomar decisiones poco gratas y que, sin duda, éramos conscientes de que no iban a ser entendidas y nos iban a generar muchas críticas entre las asociaciones, colectivos y ciudadanía en general, pero que había que asumir porque en caso contrario la solución era declararnos en quiebra y cerrar las puertas”.
El edil afirmó que “a día de hoy la situación es bien distinta y atrás quedaron aquellos duros momentos en los que el Ayuntamiento vivía con el agua al cuello, mes tras mes con el aviso de corte de suministro eléctrico del municipio encima de la mesa y con serias dificultades para pagar nóminas, gastos corrientes y facturas a las empresas que confiando en la solvencia de la corporación arrastraban deudas desde hacía más de 4 años en algunos casos y nos reclamaban desesperados un pago que ni queriendo, podíamos afrontar y a los que hay que agradecer igualmente la paciencia y las facilidades que nos dieron para hacer frente a las mismas”.
“No nadamos en la abundancia y mucho menos podemos recrearnos en los objetivos conseguidos” matizó el concejal de Hacienda que añadió “que tenemos que continuar en la senda de la estabilidad y la eficiencia presupuestaria, aspirando a terminar el año con déficit cero, aunque somos conscientes que no es fácil, y asumiendo única y exclusivamente aquellas inversiones y gastos que la economía municipal sin olvidar que vivimos en una crisis sin precedentes y antes de despilfarrar recursos para ganar rédito político y electoral, tenemos que priorizar la atención a la ciudadanía y garantizar la prestación de los servicios sociales básicos y las ayudas de emergencia además de intentar en la medida de nuestras posibilidades generar empleo que es una de nuestras grandes prioridades”.
Reconocimiento institucional
La buena gestión financiera que se está realizando en las arcas locales fue reconocida por el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, en una visita reciente en la que animó a la corporación a seguir en la senda iniciada para consolidar el esfuerzo realizado hasta el momento.
Un encuentro que el concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, Mariano Hernández Zapata, aprovechó para trasladar al ejecutivo central la posibilidad de que, una vez cumplidos los acuerdos contemplados en el Real Decreto y los requerimientos de la Ley de Estabilidad, los Ayuntamientos puedan destinar el superávit a gastos de inversión en infraestructuras o empleo, fundamentalmente, como motores del desarrollo socioeconómico local.
Mejoras sustanciales
Entre las medidas adoptadas por el área de Hacienda del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane destacan el exhaustivo estudio económico de todas y cada una de las partidas presupuestarias, contratos de suministros y proveedores, préstamos y pólizas de crédito suscritas con las diferentes entidades financieras y revisión de gastos generales, estado de la recaudación municipal y gestión de servicios municipales, entre otros apartados a fin de obtener "una radiografía completa de los puntos fuertes y débiles de la economía municipal y, a partir de ahí, tomar cuantas decisiones ha sido necesario adoptar para enderezar la precariedad económica que encontramos tras la toma de posesión".
Un conjunto de actuaciones que, a juicio del edil, "nos han permitido ajustar los gastos, optimizar los servicios, reestructurar al personal, centralizar las compras y renegociar condiciones, externalizar gestiones para mejorar el funcionamiento de determinados servicios, racionalizar los consumos y los gastos corrientes de agua y los derivados de su tratamiento para consumo potable, suministro eléctrico, papel, equipos informáticos, combustible, artículos de limpieza y fumigación, entre otros, así como realizar pequeñas obras de inversión para reparar averías históricas, sobre todo en la red hidráulica, reduciendo pérdidas y mejorando la calidad de los servicios municipales que ofrecemos a la ciudadanía".
Además, Hernández Zapata destacó que se han introducido muchas mejoras en la gestión de áreas como la de Servicios Sociales, depuración y tratamiento de aguas o recogida de basura, cerrando acuerdos con el Cabildo Insular, el Consejo Insular de Aguas o el Consorcio Insular de Servicios que "nos han permitido corregir muchas irregularidades, mejorar el funcionamiento de los servicios y cofinanciar algunos gastos que entendíamos no tenían por qué depender única y exclusivamente de las arcas municipales, habiendo programas regionales e insulares en los cuales tenían cabida y a los que no se había accedido".
Finalmente, el concejal de Hacienda enumeró algunas de las nuevas ordenanzas municipales y afirmó que "lejos de estar inspirado en un afán recaudatorio sin límites como muchos afirman, lo único que garantizan es la igualdad de derechos entre la ciudadanía estableciendo los cánones que marca la ley y fijando los mismos en función de las posibilidades económicas de cada familia o sector, sin favoritismos, sino basados en criterios públicos y homogéneos para que todos cumplamos con nuestros derechos y deberes y no en función de la cercanía, grado de amiguismo y muchísimo menos del rédito electoral que ello pudiera aportar en cada caso al Grupo de Gobierno que actualmente lidera la corporación municipal".
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