Eumelia Sanz, tiene una pluma privilegiada y, una vez más, lo ha vuelto a demostrar sumando a su amplia colección de títulos y distinciones el I premio Pedro Hernández y Hernández en la modalidad de relato corto, convocado por la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane en homenaje a un llanense que como él, se ha convertido en uno de los grandes referentes de la cultura local.
A sus 75 años, esta vallisoletana se ha convertido en la mujer más premiada de España según el Sindicato Nacional de Escritores ya que ha ganado más de 477 premios de poesía y 126 de narrativa a los que suman numerosas publicaciones. Distinciones literarias entre las que destacan la Gran Comendadora de la Orden Literaria “Francisco de Quevedo”, la Medalla de Oro “Sabio Francisco de Vitoria”, el Premio Mundial de Poesía (Puerto Rico 1987), el Certamen Internacional del Soneto o la Académica de la Real de Lérida.
Eumenia, que concurría al certamen bajo el pseudónimo de Lupe, conquistó al jurado con su obra “Bajo el hálito de la serpiente emplumada” por su manejo del lenguaje, originalidad de la historia e interesante desarrollo narrativo.
Integrado por Rosario Valcárcel Quintana, Antonio Abdo Pérez y Víctor Jesús Hernández Correa el jurado decidió igualmente conceder un total de un total de cinco accésit a “Morir dos veces”, obra de Mª Lourdes Aso Torralba (Castiello de Jaca, Huesca, 1968) por la agilidad en el transcurso de la historia, por su componente humorístico y por el modo en que aborda como personajes figuras marginales; a la obra “Gargantúa se traga a las niñas” deMiguel Ángel Gayo Sánchez (Madrid, 1966) por su soltura discursiva, por el trabajo que se hace de la intriga y por su tono transgresor.
Asimismo, la tercera y cuarta mención recayó en “Sirga”, de Antonio Piñeiro Fernández (Ribeira, La Coruña, 1962) por el equilibrio que mantiene entre la narración y los fragmentos dialogados, por el tono íntimo y entrañable que impregnan el conjunto y por su rescate del costumbrismo marítimo y en “Réquiem para un surubí orondo” Néstor Fabián Portnoy (Rosario, Argentina, 1964) por la originalidad de la historia.
Finalmente, el quinto accésit lo ganó la obra “Solac” de Alberto Fernández González (Madrid, 1955) por afrontar un tema actual y lograr una atmósfera divertida y entretenida.
La concejal responsable del área María Nieves Barroso Ramos destacó el éxito de convocatoria registrado en esta primera edición del premio que tenía una dotación económica de 300 euros para los ganadores y al que se han presentado más de un centenar de obras procedentes de buena parte de la geografía española y algunos países extranjeros.
Unos datos que, a juicio de la edil, ponen de manifiesto “el importante calado que este premio ha generado entre los amantes de la literatura de todo el mundo, cumpliendo con la proyección internacional que pretendimos otorgarle desde un primer momento y que constituye el mejor aliciente para convocar una segunda edición y solicitar el respaldo del Cabildo Insular para editar las obras en formato papel en reconocimiento a un llanense que, como Pedro Hernández, fue cronista oficial durante más de cinco décadas y el mejor embajador de nuestro municipio en el exterior”.
En lo que al premio en la modalidad de Poesía se refiere, el jurado, integrado por Ricardo Hernández Bravo, Yapci Bienes Pérez y Lucía Rosa González determinó declarar desierto el premio dada la calidad de las obras presentadas y el carácter internacional del mismo.
Referente indiscutible
Pedro Hernández y Hernández nació en Los Llanos de Aridane el 19 de marzo de 1910. Su pueblo ha reconocido en repetidas ocasiones su ingente calado en el patrocinio de la cultura. Primeramente, en 1949, el ayuntamiento de su ciudad natal le nombró Cronista Oficial y, treinta años más tarde, esta corporación, con el primer edil José María Pérez Pulido (1924-1991) al frente, lo declaró Hijo Predilecto.
Además, tras su nombramiento como Socio de Honor de la “Asociación de Poetas Canarios UNI-VERSO”, recibió el efusivo homenaje de su pueblo en la Casa de la Cultura, acto al que se sumaron, entre otros, el periodista Domingo Acosta Pérez (1919-1995), quien glosó la figura del homenajeado en sus aspectos humano y poético, mientras el novelista y periodista Luis León Barreto trazó una semblanza de su labor periodística.
En el marco de las fiestas patronales, en 1987, de nuevo el consistorio rindió distinción a este Hijo Predilecto, esta vez conjuntamente con el sacerdote Sicilia González –ya nombrado- y la centenaria cabecera Diario de Avisos. A estos honores se han sumado otras corporaciones de su ciudad natal.
A lo largo de su carrera, Hernández y Hernández transita por la poesía, la prosa y la oratoria con un entusiasmo y una entrega que sólo se explican por la pasión que sintió por su Ciudad, el Valle y la isla de La Palma. Su obra, modesta en sus pretensiones y alcance, supone, sin embargo, la contribución de un prototipo intelectual de su época, sometido a una mentalidad en la que la expresión del sentimiento y la emoción primaba muchas veces sobre la exposición positiva de los datos. A su favor cuenta el cultivo de un estilo que ha de valorarse por su cuidada corrección.
Su trayectoria vital ya fue apuntada en parte por otros cronistas oficiales de La Palma, como el extinto santacrucero Jaime Pérez García (1930-2009) o el fuencalentero Juan Carlos Díaz Lorenzo. El 25 de noviembre de 2001 falleció el que fuera Cronista Oficial de Los Llanos de Aridane durante más de cinco décadas.
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